Hace
aproximadamente un año se reunieron en Barcelona, España, expertos en
Neuroética, ciencia que estudia la responsabilidad y la propensión de
la especie humana hacia la criminalidad. Después de un arduo debate,
se llegó a la conclusión que la Bondad y la Maldad son expresiones
culturales que no tienen base orgánica, pero que existen individuos con
una tendencia biológica para hacer daño al prójimo. De hecho existen
bases para asegurar científicamente, que hasta en un 4 % de las
personas se presentan indicios o puntos de partida de su conducta futura, como la irritabilidad y la agresividad muy acentuadas. Son
peligrosos, por ejemplo, los manipuladores, los narcisistas, los
mesiánicos (salvadores del mundo), los buscadores de gloria y los
psicópatas ( la psicopatía no es una enfermedad, sino una variedad del
carácter que sabe diferenciar el bien del mal, pero no le importa
hacer daño.).
También esta demostrado, en múltiples estudios realizados en bebés, que el ser humano sabe distinguir casi desde el nacimiento, entre el bien y el mal y que la conducta moral del hombre viene desde el nacimiento. También en múltiples estudios psicológicos realizados en niños se ha demostrado que estos son justicieros natos, es decir: la justicia está prácticamente en nuestro ADN pero que no determina la conducta directamente.
Según todos los psicólogos, la maldad es incurable. Siempre en el mundo habrá alguien tratando de hacer daño a los demás. Lo que la mantiene son los llamados hilos de la maldad que son conductas que permanecen en múltiples generaciones de individuos, en sectas religiosas, en bandas criminales. La solución, para los psicólogos y antropólogos es la ruptura de estos hilos mediante una mejor administración de la justicia.
Después de hacer esta necesaria introducción , contestáremos escuetamente a la pregunta ¿Son Malos los Políticos en nuestro país? Creo que con algunas excepciones, la gran mayoría ha demostrado que actúan con maldad. Por eso para elegirlos hay que escudriñar minuciosamente en su hoja de vida y confiar plenamente en el Poder Judicial para castigar a la corrupción.
También esta demostrado, en múltiples estudios realizados en bebés, que el ser humano sabe distinguir casi desde el nacimiento, entre el bien y el mal y que la conducta moral del hombre viene desde el nacimiento. También en múltiples estudios psicológicos realizados en niños se ha demostrado que estos son justicieros natos, es decir: la justicia está prácticamente en nuestro ADN pero que no determina la conducta directamente.
Según todos los psicólogos, la maldad es incurable. Siempre en el mundo habrá alguien tratando de hacer daño a los demás. Lo que la mantiene son los llamados hilos de la maldad que son conductas que permanecen en múltiples generaciones de individuos, en sectas religiosas, en bandas criminales. La solución, para los psicólogos y antropólogos es la ruptura de estos hilos mediante una mejor administración de la justicia.
Después de hacer esta necesaria introducción , contestáremos escuetamente a la pregunta ¿Son Malos los Políticos en nuestro país? Creo que con algunas excepciones, la gran mayoría ha demostrado que actúan con maldad. Por eso para elegirlos hay que escudriñar minuciosamente en su hoja de vida y confiar plenamente en el Poder Judicial para castigar a la corrupción.